
La Selección Española Sub23 masculina de ciclismo en carretera vuelve a competir la semana que viene en una nueva cita de la Copa de las Naciones de la categoría. Tras su gran rendimiento en el Orlen Nations Gran Prix, el equipo nacional viaja a República Checa con seis corredores distintos para participar del 8 al 11 de junio en una exigente cita como la Carrera de la Paz, que cada año reúne a algunas de las mayores promesas mundiales. Una cita que han ganado en los últimos años corredores de la talla de Tadej Pogacar o figuras emergentes como Filippo Zana o Andreas Leknessund.
En el combinado nacional, dirigido por Mikel Zabala, estará compuesto tal y como sucediera en Orlen por tres profesionales y tres corredores que aún compiten en el campo amateur: Alejandro Franco (Burgos BH), Enekoitz Azparren y Xabier Isasa (Euskaltel Euskadi), Marc Cabedo (Telco’m – On Clima – Oses), Sergi Darder (High Level – Gsport – Grupo Tormo) y Hugo de la Calle (Caja Rural Alea).

El castellonense Marc Cabedo ha encontrado el premio a su regularidad. Ganó el Memorial Sabin Foruria, ha sido segundo en la Clásica de Pascua de Padrón y tercero en la prueba de la Copa España de Vigo y en la segunda etapa de la Vuelta al Bidasoa, en la que terminó cuarto tras ir de líder. Ha finalizado séptimo en la Copa de España. «Estoy muy contento de poder competir en una de las vueltas por etapas más importantes del mundo de la categoría. Llego en un buen estado de forma y espero poder dar lo mejor de mí en República Checa, tanto para mí como para el equipo. Un paso hacía delante que demuestra el trabajo que llevo haciendo año tras año y me acerca cada vez más a cumplir mi sueño», confiesa Marc.
La prueba checa se estructurará como viene siendo habitual en un prólogo de 3.1 kilómetros y tres exigentes etapas que definirán la clasificación general.
El jueves ocho de junio la competición se iniciará a las 17:00 h. con un prólogo con salida y llegada en Jeseník, donde se podrán marcar las primeras pequeñas diferencias. El viernes la etapa comprenderá 122 kilómetros con 2.000 metros de desnivel positivo acumulado, pero la verdadera dureza llegará ya el sábado y domingo, con una etapa sabatina de 129 km. y casi 3000 metros de desnivel acumulado y una jornada final de 166 kilómetros y 2682 metros de desnivel.
“Hemos hecho dos combinaciones diferentes probando ‘pros’ y ciclistas que están en el campo amateur. Buscamos testar gente a la vez que cumplir objetivos de clasificación, puntos para en Copa de las Naciones y dar un buen nivel, el que se supone a España”, ha comentado al respecto de la convocatoria el seleccionador nacional.

“Las expectativas son altas. El año pasado Franco hizo quinto, conoce la carrera… Azparren siempre anda bien y se maneja en este terreno. Llevamos gente para trabajar como Isasa, que ayudará mucho en la media montaña, en el llano. El equipo además se completa con gente como Darder y Cabedo, con punta de velocidad, que pueden rematar y son perfiles interesantes para este tipo de pruebas. Hugo de la Calle, que el año pasado era junior, va a aprender; en ese sentido queremos dar continuidad al trabajo que se ha hecho con los junior y nos interesa ver cómo se desenvuelven los más jóvenes también en estas carreras internacionales”, ha señalado también un Mikel Zabala que, por último, ha destacado que “esto es un escaparate tanto para los equipos, que es un orgullo y así me lo manifiestan los directores, como para los corredores… Hay que hacer resultados, pero sin olvidarnos de la formación, de la proyección y dejar a España en un buen lugar, tanto ahora como en el medio plazo”.
Fuente. RFEC