Héctor Celda (València, 26 de diciembre de 2006) ha puesto el punto y final a su paso por la categoría júnior en el Picusa Academy tras una campaña en la que estrenó su palmarés imponiéndose en tierras portuguesas en la general de la Challenge Volta O Barbanza. Posteriormente se adjudicaría el Trofeo Moixent. Ahora, desea seguir progresando en el campo amateur. «Me gustaría estar lo mas delante posible e intentar conseguir buenos resultados tanto a nivel individual como colectivo», apunta Héctor. Llega la hora de la verdad tras una trayectoria que inició en la categoría alevín en el Bonillo Team. Como cadete militó, primero, en el Inescar, y, posteriormente lució el maillot del Bonillo Team – Manuela Fundación. Y en la categoría júnior empezó en el Gsport – +Vatios y ha terminado con el Picusa Academy,
En la hora del balance, Celda señala que «me quedo con un buen sabor de boca que me ha dejado esta campaña. Creo que han habido buenos momentos durante el año a nivel de resultados aunque no haya sido todo lo regular que me hubiese gustado. Partiría mi tiemporada en tres partes, desde el inició hasta la Montaña Central, en la que tuve bastantes buenas sensaciones. Después, un segundo período, en el que desde el equipo decidimos levantar un poco de el pie pensando en tener un punto más de cara a la parte final de la temporada. Quizás pecamos en parar de más y después a causa de problemas de salud, que por ejemplo no me permitieron estar en Besaya, hicieron que me costara más de lo que pensaba volver a coger sensaciones para luchar por las primeras posiciones».
En la tercera y última parte de la temporada, a principios de agosto, «las sensaciones ya volvían a ser muy buenas y pude estar de nuevo con los mejores. De hecho, acabé la temporada en la Volta Portugal en la que conseguí un cuarto puesto en la general y las sensaciones eran brutales, pero el equipo ya acababa la temporada y no pude aprovechar ese buen momento de forma más tiempo. Acabo bastante satisfecho con la temporada y de ver una progresión año a año».
Entiende que la campaña 2025 es una auténtica incógnita, pero confía en seguir superar un nuevo peldaño en la escalera ciclista que espera que le lleve al profesionalismo. «Todavía no sé cómo me voy a desenvolver en la categoría de sub 23 ya que empiezan a ser distancias en kilómetros muy diferentes y ya no es lo mismo. A nivel de expectativas, para el año que viene, me gustaría estar lo mas delante posible y voy a intentar conseguir buenos resultados, tanto a nivel individual como colectivo».
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