
«He ganado la etapa más importante de mi vida. Ya estoy en casa y, por primera vez, no tengo prisa de nada: solo quiero disfrutar cada momento.
Antes, cuando entrenaba, nunca paraba en un bar… ahora es de lo que más disfruto. Estaré unos meses sin poder salir a la carretera, pero eso ya no me importa: valoro mucho más las pequeñas cosas.
Todo lo que he aprendido con médicos y enfermeras me sirve en mi día a día —y todavía más, porque mi novia es enfermera. Mentalmente me siento más fuerte que nunca frente a cualquier problema.
Hoy también quiero compartir algo muy especial: cuelgo la bici como profesional. Mi vida ha cambiado radicalmente, pero en el propio hospital la he vuelto a recomponer. Este mes empiezo las clases para el título de Director Nivel 3, para dar clases y dirigir en las escuelas de Benicàssim.
Quiero volcar todo lo que he aprendido en mi etapa profesional en los ciclistas a los que entreno. Gracias a la experiencia con mi nutricionista, mi director y mi entrenador Óscar Pelegrí, sigo creciendo dentro y fuera de la bici.
A todos los que estuvieron, están y estarán. A familia, compañeros, directores, amigos, rivales… A todos los que forman el Illes Balears arabay. A cada uno de los que estos meses destinaron un segundo para mandarme un mensaje de ánimo. A todos, GRACIAS. Se cierra una puerta, pero se abre otra. 𝗡𝗼𝘀 𝘃𝗲𝗺𝗼𝘀. 𝗘𝗻 𝗹𝗮𝘀 𝗰𝗮𝗿𝗿𝗲𝘁𝗲𝗿𝗮𝘀. 𝗘𝗻 𝗹𝗮 𝘃𝗶𝗱𝗮».