
Julen Arriola-Bengoa ha sido el ganador de la etapa reina de la Vuelta al Guadalentín, 158 kilómetros en las Tierras Altas de Lorca, con doble ascensión al Santo de la Parroquia, que ha contado con rampas de más de un 15%, y final en la Torre del Espolón del Castillo de Lorca. Tomás Miralles (Essax) ha sido segundo y se adjudica la prueba. Gran comienzo de año del alicantino. Juan Diego Cano (Brocoli) y Ferrán Robert (Controlpack) han completado el podio de la General. Por escuadras se ha impuesto el Brocar Alé.


Antonio Fuentes fue el primer escapado de la jornada. Tras ser absorbido se fraguaba la fuga del día formada por Eloy Teruel y Tristan Cardew. Movimiento que asegura la victoria de Lozano en Metas Volantes, y que encarrilaba el triunfo de Teruel en Sprints especiales y Cardew en la montaña. Llegaron a tener más de 3 minutos de ventaja. El pelotón trabajó duro y al final los absorbió.
Tomás Miralles: «Estoy muy contento. El equipo se ha dejado la piel hoy, con la ayuda de otros equipos, y era lo mínimo que podía hacer por ellos, responder a todo su trabajo conservando el maillot amarillo e intentando conquistar la etapa etapa. Lo hemos dado todo en el Castillo de Lorca pero no ha sido suficiente y he terminado segundo «.
Jaume Guardeño: Iba adelantando a Tomás por la derecha y hizo un giro brusco hacia donde estaba yo, echándome fuera de la curva para que no le adelantara. Era la última curva, y tras su intento de echarme, lo consiguió y me fui al suelo».



