El ciclista contestano vivió en primera persona el triunfo de Hinault en Ávila tras «reventar» a Julián Gorospe en Serranillos en la Vuelta a España de 1983 (Teledeporte, 16.35 horas)

Fue el seis de mayo de 1983, antepenúltima etapa (Salamanca-Ávila), cuando se vivió una de las jornadas más épicas de la ronda nacional y en la que Bernard Hinault dio un giro radical a la general pulverizando al líder, Julián Gorospe. En la ascensión del puerto de Serranillos empezó todo. ‘El Caimán’ dio su zarpazo y se escapó del gran grupo, llevándose consigo a Vicente Belda y Marino Lejarreta, los únicos en aguantar el ritmo del galo. Hinault ganó la etapa en la meta del Velódromo de Ávila y se vistió de líder. Gorospe, totalmente desfondado, perdió todas sus opciones de podio. Hoy, Teledeporte, ofrece la etapa a partir de las 16.35 horas.
«Coincidí con Hinault en el hotel un día antes y me aseguró que iba atacar en la etapa de Ávila y que si le ayudaba me iba a permitir ganarla», recuerda Vicente Belda, testigo directo de aquella hazaña del corredor galo. «Hacía mucho frío antes de salir y ellos iban de negro y con ropa de abrigo. Yo ataqué en Peña Negra junto a Nulens y Bortolotto. Subiendo Serranillos vino Rafa Carrasco y me dijo que comiera bien y recuperara, que venían por detrás Hinault y Lejarreta como aviones. Cuando llegaron me puse a rueda, aunque nunca había sufrido tanto de Serranillos a Navalmoral. A diez de meta, me acerqué al Caimán y le dije, ¿gano yo?. Sin titubear me contestó: no, Belda, hoy gano yo», relata el contestano como si fuera ayer.
Era la primera Vuelta que TVE retransmitió por completo, la del estreno de los Lagos de Covadonga (Marino Lejarreta). En Serranillos sucedió todo. Gorospe, que era líder, vigiló al «Caimán», así llamaban a Hinault, y le aguantó un primer ataque. En el segundo se enterró para siempre. El francés se marchó en el puerto de Gredos junto a Lejarreta. Belda, el belga Nulens y el italiano Bortolotto fueron cogidos enseguida y los dos últimos no pudieron seguir el paso del galo y se descolgaron.
Apenas pudieron dar relevos Belda y Lejarreta a Hinault, que superó desatado Serranillos y luego la Paramera, antes de entrar en el velódromo de Ávila, ganar la etapa al esprint del trío y dejar la imagen para la posteridad. La rabia en su cara al saber que había ganado la Vuelta.
Gorospe, dirigido por Echávarri y Unzué, llegó a 20 minutos a la capital abulense, perdió la Vuelta y no volvió a ser el mismo. Se recicló en corredor de vueltas de una semana.
Hoy en Teledeporte:
16:35 – Vuelta a España 1983. 17ª etapa, Salamanca-Ávila.