El corredor del Euskaltel se impone en el esprint a Manuel Beltrán después de protagonizar una bajada espectacular en el Alto de Monachil en la Vuelta 2007 (Teledeporte, 16 horas)

Samuel Sánchez, del Euskaltel Euskadi, hizo valer una bajada de «kamikaze» en Monachil para alcanzar la victoria en la decimoquinta etapa de la Vuelta 2007, disputada entre Villacarrillo y Granada, de 201 kilómetros, por delante de Manuel «Triki» Beltrán, al que alcanzó en el descenso, mientras que los favoritos llegaron juntos y el ruso Denis Menchov mantuvo el jersey oro. Hoy en Teledeporte a partir de las 16 horas.
Sánchez, asturiano de 29 años, uno de los fijos para el Mundial, entró con 24 segundos de adelanto sobre Carlos Barredo (Quick Step) y su compañero Igor Antón, que pasó la meta eufórico por el triunfo de su compañero. A 41 segundos se presentaron el líder Denis Menchov con Sastre, Efinkin y Evans, por lo que no hubo cambios en los puestos de honor.
Fue la tercera victoria consecutiva de «Samu», que ya lo hizo las dos temporadas anteriores en La Bien aparecida y en Cuenca, en esta última con un histórico descenso que rememoró en el puerto granadino, donde Sastre trató sin éxito de poner en aprietos a Menchov, que salió ileso, entero, con las diferencias de 2.01 y 2.27 minutos sobre Efinkin y Evans, que le escoltan en el podio. El abulense, igual, cuarto, a 3.02.
En el descenso Beltrán marcó el paso al frente, pero enseguida recibió la visita de Samuel Sánchez, el ganador del Gran Premio de Zurich 2006. Difícil enemigo, el peor posible. Un corredor que desde su debut profesional en 2000, en las filas del Euskaltel, su equipo de siempre, ha demostrado su condición de excelente «bajador», de hombre rápido, como buen aficionado a las motos. Su padre era mecánico de esos vehículos.
Beltrán y Samuel, buenos amigos, se ayudaron mutuamente en los últimos 8 kilómetros, hasta el momento de la verdad, donde cada uno miró por sus intereses. Triki, en la ocasión de su vida para ganar en la Vuelta, en el esprint final de su vida profesional, le pidió a Samuel la victoria, pero éste le negó tan suculenta petición. El ciclista del Euskaltel le comentó al andaluz que quería dedicarle el triunfo a su hijo que nacería en marzo. Así, en la recta granadina, Samuel se acicaló, cogió metros y entró eufórico con gesto de acunar a un bebé. Una dedicatoria anticipada para celebrar su tercer triunfo de la temporada.
El secreto de la victoria lo contó al final. El amuleto de tiburón tigre que le trajo su cuñado de Cuba, y que se le rompió en el descenso. La cadena cedió, pero la suerte ya estaba echada. Sin el talismán también impuso su ley, la del kamikaze.
Hoy en Teledeporte:
16:00 CICLISMO VUELTA ESPAÑA 2007 15ª ETAPA: VILLACARRILLO – GRANADA