Diario de un ciclista en cuarentena

JOSEP TOMÀS I JUAN. Corredor del Netllar Telecóm Alé

Día 16. Volver a batir mi récord de potencia

Te levantas, te pesas, te tomas las pulsaciones en reposo, desayunas, anotas como te sientes, cuánto y cómo has dormido. Haces los ejercicios de core, que no se suelen alargar más de 40 minutos, para luego subirte al rodillo.

Primero quiero que sepáis lo que ha pasado durante el entrenamiento; que no es sino volver a batir mi récord de potencia a los cinco minutos, sacando una media de 10W de más que en el intento anterior. Ahora os contaré un factor que ha sido crucial en esta “mejora” de rendimiento, y lo pongo entre comillas, porque lo que en realidad ha sucedido ha sido un cambio de mentalidad más que una toma de super-poderes ( como pudiera parecer ). De la experiencia, mi cuerpo aprendió cuál era la potencia que yo debía de ejercer durante dicho período de tiempo para sentir ya el dolor en las piernas. En cambio, gracias a poder ver mi curva de potencia en Golden Cheetah ( un programa gratuito y de muy buena calidad para el análisis de los entrenamientos ), me dí cuenta de que realmente podía ir un paso más lejos. Y eso he hecho hoy. Tan solo empezar el entrenamiento sabiendo que podía sacar un poco más de mi mismo.

En hechos como este recae la importancia de la psicología deportiva, pues el rendimiento de estos sujetos depende, en gran manera, del estado de ánimo y de la mentalidad con la que afrontan cada entrenamiento, cada competición.

Ahora, terminado el sufrimiento y habiendo descansado toda la tarde, me dispongo a leer otro fragmento de “La autopista del Sur” que espero nos haga reflexionar y nos sorprenda, no solo por la delicadeza con la que se narran los hechos, pero también por la crudeza de la realidad que desvelan. El fragmento dice así: “A veces llegaba un extranjero, alguien que se deslizaba entre los autos viniendo desde el otro lado de la pista o desde las filas exteriores de la derecha, y que traía alguna noticia, probablemente falsa repetida de auto en auto a lo largo de cientos de kilómetros. El extranjero saboreaba el éxito de sus novedades, los golpes de portezuelas cuando los pasajeros se precipitaban para comentar lo sucedido…”

Publicado por Julian

Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad de Navarra.

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