El ciclista almoradidense del Caja Rural-RGA recolecta junto a su familia 3.500 kilos de cítricos para ayudar a los más necesitados

En días de confinamiento, propiciado por la pandemia del COVID 19, el ciclismo no sólo vive de rodillo y de las redes sociales, para tratar de superar de forma virtual los puertos míticos del Tour, la Vuelta o el Giro, incluso los de la provincia de Alicante, sino que también queda tiempo para la solidaridad. En este apartado sirva como ejemplo el corredor del equipo filial del Caja Rural-RGA, Alejandro Gómiz, que ayer estuvo recolectando junto a su familia 3.500 kilos de sus naranjas para donarlas al Banco de Alimentos. José Antonio Gómiz y María Cruz Pérez, padres del ciclista, compañeros de trabajo de José Antonio y miembros de una asociación ecologista de la Vega Baja estuvieron ayudando en la tarea.
Todo es poco para echar una mano a las personas más necesitadas, en este momento tan crítico para mucha gente que no tiene trabajo. Esta aportación se unió a la realizada por La Redonda de los Huertos, empresa dedicada al servicio de clientes y agricultores. Junto a naranjas también se han aportado alcachofas y apio.
