El murciano prepara el Tour en los Alpes y el noveldense decidió colgar la bicicleta tras vestirse con el maillot rojigualdo en Murcia ante la falta de oportunidades

El próximo domingo se corre en Jaén el Campeonato de España de Fondo en Carretera y ninguno de los ciclistas que se enfundó el año pasado el maillot rojigualdo, en las categorías Élite UCI y Élite, tomarán la salida. Alejandro Valverde, porque se va a concentrar con su equipo, el Movistar, para preparar el Tour de Francia, mientras que el noveldense Julio Alberto Amores decidió colgar la bicicleta a finales de 2019 tras no poder dar el salto al campo profesional a pesar de su gran palmarés y de conseguir el título de campeón de España.
Una vez concluido el Criterium de Dauphiné este pasado domingo, Movistar Team reúne durante esta semana a la práctica totalidad de su grupo humano para el Tour de Francia 2020 en los Alpes. La escuadra telefónica reconocerá algunas etapas de la inminente ronda francesa antes de desplazarse hacia Niza en los días previos al arranque. El conjunto dirigido por Eusebio Unzué pretende así preservar a su bloque desde el punto de vista sanitario y llegar al inicio del Tour con las máximas garantías posibles.
Movistar Team ha convocado un grupo de 10 ciclistas del que saldrá, salvo novedad, la alineación definitiva para el Tour. La lista se compone de Dario Cataldo, Imanol Erviti, Enric Mas, Nelson Oliveira, Antonio Pedrero, Jürgen Roelandts, José Joaquín Rojas, Marc Soler, Alejandro Valverde y Carlos Verona. Ninguno de los diez disputará el Campeonato de España que se corre el fin de semana en Jaén.

Ballesteros, el favorito de Amores
Amores verá el domingo los toros desde la barrera. El alicantino tiene todavía muy presente aquella carrera, como si hubiera sido ayer, cuando batía al esprint a Jesús Alfonso Arozamena y a Jorge Montenegro, que le acompañaron en el podido de su categoría. En Élite UCI, Valverde tuvo a su lado a Luis León Sánchez y a Jesús Herrada. «La carrera del año pasado en Murcia la recuerdo muy nerviosa, ya que la fuga no se consolidó hasta el kilómetro 120. Entramos al circuito y en los últimos compases de la prueba me vi delante del pelotón y decidí atacar, aunque me pillaron los grandes equipos World Tour. Guardé todas las fuerzas que pude hasta meta, donde decidí probar en el esprint. Conseguí el noveno puesto en la carrera y el primer élite. A partir de ahí, mucha emoción e ilusión por un sueño que finalmente no llegó».
A juicio del corredor noveldense la fórmula de la prueba es clara. «El día de la carrera hay que intentar mantener la calma, el trabajo ya está hecho en todos los meses anteriores. Es un día de gran ilusión por estar al lado de los grandes ídolos, toca disfrutar de este bonito deporte e intentar estar atento a cada movimiento que se produzca. Es una carrera muy larga y dura y hay que intentar llegar con fuerza a los últimos kilómetros, que serán los decisivos», avisa.
«¿Favoritos? Para cualquier ciclista élite el campeonato de España es el objetivo principal de la temporada (sin contar la Copa de España). Es la única carrera en la que se está al lado de los profesionales y pueden medirse con ellos. Realmente todos luchan por hacerlo bien y cualquiera puede ganar. Si tengo que elegir un favorito, me quedaría con Miguel Ángel Ballesteros, del Caja Rural. Entre los profesionales, apostaba por Valverde, pero me han dicho que no lo corre», concluye.